El sistema inmune o también denominado sistema inmunológico es el conjunto de células y procesos biológicos de nuestro cuerpo que tienen como objetivo defendernos ante situaciones de peligro o invasores externos. Este sistema se puede comparar con un ejército que está constantemente en alerta, supervisando que todo esté en orden. En el momento que alguno de sus integrantes detecta algo extraño, prepara su artillería y ataca en cuestión de minutos. La clave del éxito del sistema inmune es el trabajo en conjunto que llevan a cabo todos sus integrantes, siendo la comunicación entre ellos un factor esencial para conseguir vencer al enemigo.
Este ejército está formado por varios tipos celulares, con diferentes características y propiedades. Estas células son los denominados linfocitos, neutrófilos, monocitos, basófilos, eosinófilos, macrófagos o células dendríticas… cuyas armas son biomoléculas (citoquinas, gránulos y anticuerpos) que liberan de forma específica cuando se activan ante el riesgo. ¿Porqué es tan importante cuidar nuestro sistema inmune? Nuestro cuerpo se ve continuamente expuesto a un sinfín de agentes invasores que se encuentran a nuestro alrededor, desde virus intracelulares de nanómetros, hasta parásitos de 100 cm de longitud. Por esta razón necesitamos un sistema inmunológico altamente variable y flexible. Aunque  la función que cumplen nuestras células inmunes es excelente, a veces ocurren fallos, y nuestro sistema inmunológico se encuentra débil vulnerable a los patógenos, provocándonos enfermedades infecciosas o autoinmunes que pueden derivar en infertilidad. Como ocurre en la mayor parte de nuestra fisiología, el sistema inmune se ve influenciado por la genética a la vez que por el ambiente. Es decir, si llevamos un estilo de vida saludable ayudamos a mantener fuertes nuestras barreras inmunológicas. Estos son algunos consejos a seguir para estar preparados ante los ataques de los microorganismos:
  1. Comer ajos y champiñones. Ambos son antioxidantes, antibióticos naturales que permiten la renovación celular con propiedades anti inflamatorias.
  2. Reducir estrés. El estrés perjudica altamente el sistema inmune, por tanto actividades como yoga, pilates o meditación ayudan a mejorar nuestra salud.
  3. Tratar de usar a menudo hierbas como cúrcuma, orégano y pimentón, conocidas en gran medida por sus propiedades medicinales.
  4. Hacer deporte de forma regular. La actividad física activa la formación de las células del sistema inmune además de ayudarnos a mantener un peso adecuado y evitar enfermedades metabólicas.
  5. Seguir una dieta fundamentada en frutas y verduras. Los alimentos ultraprocesados tienen menor proporción de nutrientes y numerosos inconvenientes para nuestra salud.
  6. Tener eventos sociales. La interacción con nuestro alrededor incrementa endorfinas y otras hormonas que inducen relajación.
  7. Dormir entre 7 y 9 horas al día. Un buen descanso ayuda a la correcta distribución de las células al sitio de infección.
  8. Pasar tiempo al aire libre. Existen estudios que demuestran que la luz solar ayuda a la activación de las células inmunes.
  9. No fumar ni beber alcohol en exceso.
  10. Lavarnos las manos con frecuencia para eliminar microorganismos.
Para problemas de fertilidad, en Pronacera disponemos de test que ofrecen un análisis integral de la receptividad, microbiota, estado inmunológico y funcional del endometrio. Esta prueba tiene como objetivo dar explicación a aquellos casos desconocidos de infertilidad, como puede ser fallos en el sistema inmune de la paciente, para poder actuar sobre ellos desde otro punto de vista.

Recursos: 

Harvard Medical School

Inmunología Kuby 7ª edición