Material y métodos 

Este estudio se llevó a cabo sobre 33 pacientes de FM (2 hombres y 31 mujeres) de la Asociación de Fibromialgia de Tomares (Fibro-Reto) diagnosticados según los criterios del Colegio Americano de Reumatología y 30 personas sanas. El impacto de la FM en los pacientes se midió a través del Cuestionario de Impacto de la Fibromialgia en español (FIQ). Un subgrupo de 13 pacientes participó en el tratamiento con ubiquinona para estudiar el potencial efecto beneficioso de esta en la patología). Para determinar la bioquímica general (urea, glucosa, ácido úrico, proteína total, etc.) y la función mitocondrial (niveles de expresión de las proteínas lc3-IIb y VDAC/porina por western blot y niveles de coenzima Q10 por cromatografía líquida de alto rendimiento) de los participantes se utilizó sangre venosa y células mononucleares de sangre periférica, respectivamente. Así mismo, para conocer la homogeneidad del grupo de pacientes de FM y evaluar mejor el impacto del tratamiento con coenzima Q10 se empleó el algoritmo de esperanza-maximización (EM) de machine learning.  

Resultados 

No se encontraron diferencias significativas entre los valores de coenzima Q10 en el grupo de pacientes de FM respecto al grupo de personas sanas, aunque los valores intergrupales resultaron altamente variables. Así pues, se procedió al cálculo de la ratio entre la masa mitocondrial y la autofagia mitocondrial o mitofagia en los pacientes de FM para estudiar su validez como biomarcadores de la patología, obteniendo resultados dispares que permitieron clasificar a este grupo en 3 categorías: pacientes con una ratio menor de 1 (69% de pacientes con menor masa mitocondrial y un desempeño de mitofagia demasiado elevado), pacientes con una ratio igual a 1 (18% pacientes con un equilibrio entre la masa mitocondrial y la mitofagia) y pacientes con una ratio superior a 1 (12% de pacientes con una elevada masa mitocondrial y mitofagia disminuida). Además, de los 13 pacientes que se sometieron al tratamiento con ubiquinona, el 67% experimentó mejoría en la sintomatología de la enfermedad y más de la mitad consiguieron equilibrar la ratio masa/mitofagia, resultado que apoya el uso de este compuesto en el tratamiento de la FM. Estas diferencias en los resultados en los pacientes podrían deberse a la heterogeneidad del grupo y su sintomatología, como así apuntaba el agrupamiento resultante de aplicar el algoritmo EM en este grupo. 

La visión de SINAE/PRONACERA 

Este estudio ejemplifica a la perfección la complejidad de la FM, pues incluso dentro del grupo de pacientes se encuentra una gran variabilidad en cuanto a los distintos marcadores mitocondriales. A pesar de ello, se vuelve a señalar una vez más a la mitocondria como un orgánulo clave en la etiopatogenia de la FM, demostrando la utilidad de la determinación de la ratio masa mitocondrial/autofagia (niveles de proteína VDAC/ niveles de proteína lc3-IIb) como biomarcador para el diagnóstico y seguimiento de estos pacientes. Así mismo, se resalta el papel de la coenzima Q10 como potencial tratamiento coadyuvante en la patología. Sin embargo, es importante continuar la investigación al respecto aumentando el número de participantes, pues el complejo cuadro clínico de la FM apunta a que se trata de una alteración multifactorial, con características diferenciales entre los propios pacientes, y que requiere ser abordada desde distintas perspectivas terapéuticas.